Ni bien entra al aula, antes del saludo
de rigor mañanero, nota que Sánchez está con la mano levantada. Conociendo el
paño decide darle la palabra de inmediato, para que el estudiante bueno e
ingenioso, aunque imprevisible, haga lo suyo para después sí comenzar con la
clase.
-¿Felipe? -dice el de Formación cívica
al tiempo que acomoda sus apuntes sobre el escritorio.
-Nada, profe –responde el muchacho
dispuesto a seguir-, nada más quería hacer un comentario.
-Dale.
-No, como en el cable este fin de semana
tuvimos los canales codificados de Fox gratis me dediqué a ver unos cuantos
filmes…
-¿Qué películas viste?
-En particular quería referirme a Dioses
de Egipto y Víctor Frankenstein, porque de alguna manera tienen que ver con
cosas que hemos estudiado en el colegio, no sólo en esta materia.
-¿Y?
-Y que al final llegué a una conclusión -continúa el estudiante que traga saliva y cierra. -Por el modo en que trata los temas de las antiguas civilizaciones, la teología y los clásicos de la literatura, me parece que Hollywood se toma algunas libertades creativas.
-Y que al final llegué a una conclusión -continúa el estudiante que traga saliva y cierra. -Por el modo en que trata los temas de las antiguas civilizaciones, la teología y los clásicos de la literatura, me parece que Hollywood se toma algunas libertades creativas.
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